Esta serie de artículos está dirigida a los jóvenes, pero sobre todo a los padres con el propósito de que sepan cómo ayudar a sus hijos adolescentes a vencer las tentaciones promovidas por la presión sexual de sus amigos y de los medios masivos de comunicación como las redes sociales, la música y las películas románticas. (Salmos 11:3) “Si fueren destruidos los fundamentos, ¿Qué ha de hacer el justo?” Como sabemos el mundo ha desvirtuado y torcido los conceptos y valores fundamentales de la sociedad basada en el cristianismo bíblico. Así que los padres tenemos el desafío y la gran responsabilidad de guiar a nuestros hijos.
Como padres en algún momento nos enfrentaremos al momento cuando tendremos que hablar con nuestros hijos adolescentes sobre el tema de las relaciones sexuales antes del matrimonio. ¿Qué razones darles para que se abstengan de las relaciones premaritales? Hay una razón básica, Dios nos lo prohibe y es causa suficiente para refrenarse de tal conducta. No obstante, hay numerosas razones para obedecer su mandamiento y es vitalmente importante conocerlas y el porqué. Aquí les comparto ocho buenas razones para que sus adolescentes esperen.
¿POR QUE ESPERAR?
Tengo ocho buenas razones para que tu adolescente espere, cuatro son beneficios y las otras cuatro consecuencias.
BENEFICIOS
1. EL ESPERAR AYUDA A DESARROLLAR UNA RELACION BASADA EN AMOR VERDADERO.
Todos deseamos una relación de amor íntimo y el sexo es la expresión física de esa relación. Pero es sólo un reflejo de intimidad, no la causa. Cuando el sexo está primero que una relación personal, no deja que el verdadero amor se encuentre y se desarrolle. Así que al tener intimidad antes del matrimonio arruina las oportunidades de conocer el amor verdadero y la persona correcta, la que Dios le tiene destinado y escogido.
2. EL ESPERAR DESARROLLA EL CARACTER.
El sexo está diseñado para experimentarse entre dos personas casadas, construido sobre autocontrol, disciplina, sensibilidad, paciencia, compromiso, confianza y fidelidad. Cuando está gobernado por esas cualidades capacita a la pareja para gozar de grandes profundidades en intimidad y unidad. Cuando el joven aprende a esperar está desarrollando autocontrol, paciencia, disciplina, fidelidad, etc. En otras palabras está desarrollando carácter, y éste es el fundamento para construir una relación matrimonial satisfactoria y duradera.
3. EL ESPERAR ASEGURA UNA RELACION CONFIABLE.
La confianza es fundamental para el matrimonio. Cuando un esposo o una esposa sabe que el otro ha esperado, se fortalece el factor de confianza. Si un hombre y una mujer pueden esperar hasta el casamiento para consumar el sexo, hay una confianza agregada de que él o ella se mantendrá fiel después del matrimonio. Muchas de las veces haber tenido relaciones sexuales antes del matrimonio, es como haber sembrado semillas de duda y desconfianza que darán frutos amargos después. Una pareja que había estado casada por 20 años, tratando de evitar que su matrimonio se desintegrara fueron a consejería, y se quejaban que nunca en todos sus años de matrimonio habían confiado el uno al otro, habían vivido 20 años de sospechas y desconfianza, por que habían tenido relaciones sexuales antes del matrimonio. Esperar te evitará años de amargura producida por la desconfianza en tu pareja.
4. EL ESPERAR CONSTRUYE UNA BUENA AUTOESTIMA.
El esperar desarrolla el carácter y, mientras el adolescente ve que así sucede, su autoimagen mejora. Es común en los jovenes adolescentes verse en el espejo y no agradarse a si mismo. Pero estudios nos dicen que cuanto valor añade a su persona el joven que espera. Esperar hace madurar y una de las señales más comunes de la madurez es el gustarse, el valorarse y sentirse bien con uno mismo. El joven que espera no sufrirá las malas consecuencias, por lo tanto su sentido de satisfacción personal será mucho mayor que de aquel que no supo esperar hasta el matrimonio.
Querido padre y madre de hijos adolescentes, yo se lo que se siente tener hijos de esa edad, pues ya pase por eso hace varios años. Por es oro por ti, para que Dios alumbre tu mente y te de la sabiduría para hablar con tus hijos sobre este tema. No dejes que sus amigos u otras personas sean los que aconsejen a tus hijos sobre este tópico, pues muy seguramente les darán consejos equivocados.
Continuará…